
Scott Pruitt, director de la EPA (Flickr/Gage Skidmore)
Este jueves, el Senado estadounidense confirmó a Scott Pruitt como director de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), sin los votos de los demócratas. Estos intentaron bloquear la elección el miércoles no asistiendo a la votación –hicieron lo mismo con las nominaciones de Steve Mnuchin y Tom Price como secretario del Tesoro y secretario de Salud, respectivamente–, pues las reglas del Senado establecen que al menos un miembro de la minoría esté presente para votar en la comisión. Solución: los republicanos cambiaron de inmediato las reglas de la comisión para poder aprobar las nominaciones sin necesidad de la oposición.
Se espera que con su nombramiento, al menos se despejen la incertidumbre que ha habido en la EPA desde la toma de posesión del presidente Donald Trump. Trabajadores tanto de esa agencia como de otros departamentos, como el de Agricultura, filtraron a la prensa que les estaba imponiendo restricciones para informar sin el permiso de la nueva Administración, y hacían un llamado a guardar toda la información de que dispusieran, ante el temor de que el Ejecutivo la borre definitivamente.
La alarma no era gratuita. En el «día uno» de su toma de posesión, Donald Trump informaba del cambio claro de rumbo en la política energética de Estados Unidos, como recogía AMC Exprés.
Durante la audiencia ante el Senado para su confirmación, Pruitt dijo que no estaba de acuerdo con la opinión expresada alguna vez por Trump de que el cambio climático era un «bulo» inventado por los chinos, pero tampoco se pronunció sobre si la actividad humana es la responsable del calentamiento global, algo en lo que hay consenso entre los científicos.
